Cognizant, empresa global de desarrollo e implementación de software para grandes corporaciones, destinó para sus oficinas centrales un edificio de 6500m2 para el cual Kraftwelt proyectó y dirigió la refacción, ampliación y puesta en valor.
Dicho edificio existente respondía tipológicamente a características fabriles, grandes luces, techos de chapa y amplios espacios interiores desarrollados en dos plantas que ocupaba la totalidad del terreno a partir de diferentes crecimientos no planificados.
El objetivo proyectual se direccionó a demoler estratégicamente diferentes sectores del edificio sin restarle superficie cubierta, permitiendo el ingreso de luz natural a partir de lucarnas acristaladas que consiguieron iluminar y sectorizar áreas.
En dichos “huecos” de doble altura se ubicaron los núcleos circulatorios verticales, mientras que las salas de reuniones, oficinas privadas y salas de capacitación se agruparon en forma de núcleo central permitiendo su identificación por la materialidad y color seleccionado.
Las diferentes áreas operativas de planta libre se dispusieron perimetralmente a dicho núcleo central, las mismas presentaron escalas y espacialidades diferentes resultantes de los sucesivos crecimientos detectados como precedente.