ARTÍCULO DE OPINIÓN: Arq. Daniel Stinchi, Responsable de Estrategia Comercial y Financiera de Kraftwelt.
Tras nuestra labor Profesional en el Distrito Tigre Sur con el Desarrollo de Tigre Sur Workplace, y después de haber leído cada nota publicada en este News por el Dr. Edmundo Cavalli -nuestro Consultor en Retail-, y presenciado la charla «Nuevas tendencias en Centros Comerciales» (síntesis de lo recogido en los Congresos de Los Angeles y Cartagena), expuesta por los Consultores Del Río y CCLA en el ámbito de la Camara Argentina de Shopping Centers, solo puedo pensar que como dice Anaxágoras de Clazomene, primogénito de Empédocles (“Aristoteles” para la Grecia Clásica): Todo tiene que ver con todo.
De la suma de los conceptos a los que estuve expuesto -que aislados no tienen conexión evidente-, se desprende que los Shopping Centers no van camino a la muerte gracias a los canales de venta on line (compras por la web), sino que cabe la posibilidad de un resurgimiento al transformarse en lugares de experiencia, donde la Arquitectura y los conceptos off line (locales) tienen mucho que ver.
¿Por qué sumo todo en la misma bolsa?
Por un lado tenemos el advenimiento de las teorías del urbanista dinamarqués Jan Gehl: Las ciudades vuelven a la fuente, el ciudadano se apropia de la calle como lugar donde desarrollar sus experiencias de vida, se revela al encierro de los barrios cerrados y edificios en altura. La trama urbana debe abrirse al usuario ganando en relacionamiento humano y por ende en seguridad.
Tomar cartas en el asunto implica resignificar el modo en que deseamos vivir. Hoy la calle está perdida entre muros y tránsito, nos encerramos en nuestras oficinas, casas y centros comerciales, con el mínimo contacto humano posible.
Si bien en el futuro – a partir de las crisis económicas- las ciudades van a seguir contando con unidades de vivienda de dimensiones exiguas, la idea de usar las calles como extensiones de las mismas es tentadora.
Los nuevos Shoppings como lugares de experiencia
Retomando el tema de este artículo, el concepto anteriormente expuesto sirve para pensar el rediseño de los antiguos espacios de venta como nuevos espacios de encuentro y experiencia.
Los viejos espacios cerrados, con locales de imagen semejante, llenos de góndolas donde no se puede caminar y con una mínima superficie de expansión (food court promedio 15% sobre la superficie rentable), van a dar paso a lugares de experiencia, donde las personas quieran estar porque están cómodas, sin sentirse invadidas. Los espacios de esparcimiento pasan a tener más del 30% de la superficie de renta, y el concepto de venta cambia.
El falso dilema: el on-line vs el offline.
Un amigo que trabaja en Adidas Alemania me dijo hace un par de meses atrás, – «ya no importa dónde me compren, no tiene porque ser desde una tienda, lo importante es que me compren. Hoy los locales de Retail se transforman en lugares de experiencia, donde el consumidor final puede ver, tocar, probar, experimentar con el producto. Después, si compran desde la web está bien. El hecho es vender. La experiencia la tengo desde el off line (local) y la compra la hago desde el on line (web), pero una necesita de la otra. De hecho, esto genera la aparición de un nuevo jugador, el pick-up, concepto de retiro que puede realizar el cliente yendo al local o al centro de logística barrial.”
Como ven, esta afirmación expresa todos los conceptos de Edmundo sobre lo que se viene en Retail. Y como dicen las estadísticas, cuando se abre un punto off line aumentan las ventas on line.
Ya hay muchas marcas que comenzaron a transitar por este camino ganando terreno entre sus competidores. Desde marcas de autos que venden online (sin concesionarias) pero ofrecen la experiencia de uso en los Centros Comerciales, hasta conceptos como Amazon Fresh y Go.
Como Arquitecto considero que el desafío futuro de los Shopping Centers no solo pasa por la Tecnología. Aunque partamos de la creación de espacios sustentables, tenemos que cambiar el concepto de centro comercial (cerrado) por centro de encuentro (abierto), donde las nuevas estrellas sean las áreas comunes, de esparcimiento y los foods courts, pensadas por y para el usuario, en integración con la ciudad que habita.
Pues los shoppings ya no serán “m2 de venta tradicional” sino “m2 de venta experiencial”.