La velocidad con la que la tecnología transforma los diferentes procesos proyectuales nos desafía constantemente a redefinir nuestra metodología de trabajo, ofreciendo infinitas variantes y nuevas formas de abordar los proyectos.
En Kraftwelt, reconocemos la importancia de no perder ciertos procedimientos tradicionales, por lo que los integramos estratégicamente a las nuevas tecnologías para potenciar los resultados finales.
Nuestro día a día se divide en dos grandes mundos
El mundo creativo
En el mundo creativo es donde la sinergia de los diferentes equipos de trabajo toma protagonismo. Múltiples ideas se traducen en esquemas y dibujos, todos fundamentados en las necesidades y expectativas particulares de nuestros clientes. Cada proyecto es una oportunidad para desafiar la creatividad colectiva, buscando siempre una respuesta innovadora y personalizada.
El mundo técnico
Transformamos en realidad la creatividad a través de estándares específicos que permiten documentar y materializar las ideas. Estos detalles técnicos nos aseguran que lo que hemos diseñado sea ejecutado de manera precisa y eficiente, logrando así que la obra diseñada se convierta en un espacio tangible y funcional.
Profundizando en el proceso creativo
Desde sus inicios, Kraftwelt ha mantenido un fuerte vínculo con la Universidad de Buenos Aires (UBA) gracias a nuestra actividad docente, y eso ha marcado profundamente nuestra dinámica proyectual. A lo largo de 20 años, este nexo nos ha permitido nutrirnos de jóvenes talentos, tanto de estudiantes en su etapa final como de profesionales recién graduados, quienes aportan frescura y nuevas perspectivas.
Uno de los pilares clave de nuestro proceso creativo es la colaboración intergeneracional. Los jóvenes profesionales trabajan en conjunto con arquitectos de mayor experiencia, así como con los titulares de Kraftwelt, quienes, con su visión integral y experiencia de años en la profesión, enriquecen cada propuesta.
¿Cómo iniciamos el proceso creativo?
Todo comienza con una profunda comprensión de las necesidades y el perfil del cliente. Este primer paso es fundamental. Organizamos varias reuniones con el cliente, donde participa gran parte del equipo creativo. El objetivo es interpretar sus deseos desde diferentes perspectivas sin perder de vista el core de su negocio, asegurándonos de abarcar cada detalle.
Posteriormente, realizamos reuniones internas, que funcionan como talleres de producción creativa. Es fascinante observar cómo cada integrante del equipo llega armado con su herramienta preferida, ya sea digital o manual, para traducir las ideas en bocetos, maquetas y esquemas que empiezan a darle forma a la visión del cliente.
Es en estas reuniones donde las diferentes generaciones interactúan y se complementan. El uso de marcadores de color, lapiceras, crayones y papel calco se fusiona con las pantallas táctiles, lápices ópticos y software 3D. El dibujo a mano, las manchas y los esquemas coexisten con imágenes digitales y maquetas, creando un paisaje creativo que es la síntesis de más de 100 años de historia en la arquitectura.
Esta dinámica también demuestra cómo lo artesanal y lo tecnológico pueden integrarse a la perfección, generando soluciones creativas únicas.
La creatividad es un flujo continuo
Una vez terminada la reunión creativa, creamos un «Grupo de WhatsApp de ideas» donde participan todos, desde los dibujantes hasta los directores del estudio. Este espacio de diálogo abierto y constante permite que las ideas fluyan sin restricciones. Dibujos, textos, fotos y referencias cruzadas circulan, manteniendo el proceso creativo en movimiento.
Lo más interesante de este grupo es que demuestra que el proceso creativo no puede modularse solo en reuniones. Es un flujo continuo que necesita reflexión y evolución permanente, algo que fomentamos activamente en Kraftwelt.
Finalmente, y quizá lo más importante, es que todo este proceso creativo no es solo interno. Lo compartimos con nuestros clientes en cada presentación. Les mostramos de manera sintética y visual las etapas de desarrollo, permitiéndoles ser parte del viaje creativo y ayudándonos a ajustar el proyecto a sus expectativas en tiempo real.
Este enfoque garantiza que cada cliente vea su visión reflejada en el resultado final y que confíe en que su proyecto está en manos de un equipo que combina experiencia, creatividad y tecnología de vanguardia.
Arq. Claudio Fraga
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